Le asusta descubrirse detrás de una cada vez que empieza a ahogarse tras las pestañas, siempre hay dos segundos de caída libre antes de comprobar que ha sido capaz de seguir respirando sin que nadie note cuantísimo le ha costado. Objetivo conseguido.
Son una especie de calma antes de la tormenta, sí, ella lo hace todo al revés. Por eso le disgusta encontrarse en ese punto; a cámara lenta se le para el tiempo al mundo, ella se vuelve sorda y muda, aguanta la respiración creyendo que así conseguirá encontrar las fuerzas que realmente no tiene, parpadea buscando impulso... y tras dos segundos de terror y sudor frío, levanta la barrera.
Yo creo que es una artista de las grandes, no conozco a nadie capaz de crear semejante máscara en tan poco tiempo. Obviamente, ella no está de acuerdo conmigo, en su teoría sobre los errores de fábrica éste es uno de los peores, porque se vuelve contra uno mismo, es como esos atajos que acaban en callejones sin salida.
Llegará el día, y eso es lo que tanto le asusta, en que su garganta no dé más nudos de sí y se le desborden los siete mares enteros de los párpados, y seguramente se ahogará, porque nunca ha querido nadar ni gritar para pedir ayuda.
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